Nissan afronta un futuro incierto
Hace poco días, Nissan reportó ventas globales muy negativas, preocupando a analistas ante la posibilidad de que no alcanzaran los pronósticos de su año fiscal y que ya habían reducido en julio por las bajas ventas a nivel global. El beneficio operativo cayó un 99% durante el trimestre pasado y las ventas cayeron un 5.5% en agosto, siendo el quinto mes consecutivo de números rojos de acuerdo con Bloomberg, con lo que en el futuro de Nissan afronta un posible desastre.
La situación se volvió aun más compleja porque Nissan anunció las ventas del tercer trimestre en Estados Unidos, con una caída del 2.2% respecto al año pasado, en el que ya no habían sido buenas. En mercados clave como China y Estados Unidos el desempeño es pobre y el futuro de Nissan es precario, con la pregunta de si podrán o no darle vuelta a la situación.
El futuro de Nissan es incierto porque no tiene buenos resultados en Estados Unidos y China
Uno de los problemas más grandes de Nissan está en sus dos mercados más grandes: Estados Unidos y China. Juntos representan prácticamente la mitad de las ventas globales y ambos están teniendo un desempeño bajo, pues en China las ventas cayeron un 24% en agosto, un desempeño esperado porque ya habían empezado con el cierre de una planta y los recortes de producción ante años de malos resultados.
Competidores locales como BYD le tomaron la delantera en la carrera de autos eléctricos, ofreciendo modelos con las características de alta tecnología que los clientes esperan, mientras Nissan no ha podido mantener el ritmo.
La situación en Estados Unidos tampoco es positiva, pues Nissan necesita capitalizar la creciente demanda por híbridos pero no lo ha hecho tan ágilmente como Hyundai o Kia. En Estados Unidos no cuentan con modelos híbridos, a pesar de que son extremadamente populares. También es cierto que, como en el mercado mexicano, muchos de sus modelos ya envejecieron, pues algunos no han tenido actualizaciones por un largo tiempo y otros, son “nuevas generaciones” basadas en plataformas anteriores, como la Pathfinder, el Z o la pickup Frontier, que debutaron recientemente pero que mecánica y estructuralmente son casi idénticos a sus iteraciones pasadas, en plataformas con más de 10 años en el mercado.
Al mismo tiempo, la gama de competidores como Ford, Chevrolet, Honda, Hyundai o Kia es mucho más fresca y está ubicada en un rango de precios similar.
En agosto, las ventas se mantuvieron casi planas, con una reducción de solo el 0.1%, una caída mucho mejor contenida que la de China, pero preocupa porque otros fabricantes ven crecimientos importantes en donde Nissan cae, especialmente basados en segmentos híbridos en los que Nissan no participa.
Con menos ventas, los inventarios crecen y los distribuidores pierden rentabilidad
Por ejemplo, Hyundai creció un 5% en el tercer trimestre del 2024 y Nissan cayó un 2.2%. El éxito de Hyundai viene en parte de su gama híbrida, que ganó un 36% en septiembre respecto del mismo mes en 2023.
Los estragos por los que atraviesa Nissan impactaron fuerte a los concesionarios en Estados Unidos, pues sus utilidades cayeron un 70% respecto del año pasado y a pesar del incremento en gasto en publicidad e incentivos, muchos aun tienen autos modelo 2023 que no pueden vender.
Además, el vehículo eléctrico más popular de Nissan, el Ariya, no califica al crédito de impuestos de 7,500 dólares porque se fabrica en Japón, lo que hace que modelos de otras marcas, hechos en Estados Unidos, tengan mucho más sentido.
El panorama financiero es problemático, pues este año fiscal tendrán un beneficio un 12% más bajo que los estimados, mientras que la meta de ventas cayó hasta los 3.65 millones de unidades en todo el mundo. Esos números no inspiran confianza de los inversionistas y las acciones cayeron un 27% en el transcurso de este año, con más noticas negativas en el horizonte ante el reporte de ingresos que es en noviembre y será monitoreo de cerca. Si las ventas en China y Estados Unidos no mejoran, podrían tener otro trimestre difícil.
Un futuro financiero incierto para Nissan
Nissan tiene planes para revertir la situación, con la promesa de lanzar siete nuevos modelos, todos híbridos o eléctricos en Norteamérica de cara al 2028, aunque tendrán el reto de convencer a los clientes de que opten por sus modelos y no por los de la competencia, que para entonces ya tendrán un recorrido en el mercado, con un historial de fiabilidad y una reputación de durabilidad, mientras que Nissan empezará de cero.
Para muchos, un híbrido es sinónimo de Toyota o hasta de Ford y Hyundai, mientras que aquellos que buscan eléctricos van directo por los de Tesla o Chevrolet. Será complicado convencerlos de que volteen a ver a Nissan cuando están tan familiarizados y confían ya en otras marcas, así que el esfuerzo de electrificar la gama podría llegar demasiado tarde.
El futuro de Nissan es incierto, pero hay opciones para no caer en un abismo financiero. Nissan va a necesitar de precios agresivos para sus nuevos modelos híbridos y de incentivos para mover el inventario de autos actuales. También tiene que recuperar la confianza de los clientes con autos competitivos, tecnológicos y durables.
La supervivencia de Nissan podría pender de un hilo y depende su capacidad de tomar decisiones ágiles y decisivas en una industria que cambia más rápido que nunca. Los próximos trimestres serán cruciales y los inversionistas, distribuidores y clientes estarán con toda la atención para ver si pueden dar giro a la situación antes de que sea demasiado tarde.
Información de Autoblog