.Nuevo CUPRA Terramar acaba de aterrizar en México de la mano de todo el estilo y carácter deportivo que caracteriza a la marca.
CUPRA Terramar no es solo una SUV compacta; es la respuesta emotiva y llena de carácter de CUPRA a un segmento que es de los favoritos del mercado mexicano.
Es una apuesta por mejorar el espacio, equipamiento y desempeño. En dimensiones, CUPRA Terramar crece 11 centímetros frente a Ateca, aunque su línea se mantiene baja y ancha, lo que le da una postura más atlética.
Es hasta ahora el CUPRA más grande de la familia, por lo que creemos que quienes vengan de los otros modelos de la marca sentirán inmediatamente ese respiro extra, ideal para viajes en familia o cuando el fin de semana exige espacio.
Creemos que esa combinación genera una presencia visual que se siente moderna, sin traicionar el estilo de la marca. Comparada con lo que hay en el segmento, que apuestan por siluetas más altas, Terramar deja claro que no solo gana en largo, sino también en actitud.
Detalles que importan: el frontal con su típica “nariz de tiburón”, las luces LED triangulares y los acabados en cobre son gestos estéticos que hablan de un diseño bien pensado, no de mero adorno que, además, no deja de lado el carácter único con una gama de colores que solo podrás encontrar en CUPRA.
El remate perfecto son los rines de hasta 20 pulgadas con colores y diseño exclusivo refuerzan ese lenguaje visual.
CUPRA Terramar, Impecable como es costumbre
Por dentro CUPRA Terramar ofrece materiales con con tacto premium, sin exagerar. La cabina está orientada hacia el conductor, con una pantalla de 12.9″, cuadro digital de 10.25″ y un ensamble sumamente cuidados que invitan a tocar, a explorar.
Agrada el sistema de control por voz y conectividad inalámbrica completa. La VZ añade sonido Sennheiser con 390 W y 11 bocinas para una experiencia inmersiva.
Además, la iluminación ambiental crea esa sensación de estar en una pequeña cabina lounge. Parece que CUPRA quiso que, al subir, sintieras algo más que botones e indicadores: una experiencia.
Uno de los detalle que agradan en CUPRA Terramar son los asientos tipo cubo que, en la VZ, son calefactables y con ajuste eléctrico y memoria para el conductor. La iluminación ambiental multicolor, el volante calefactable forrado en piel y los pedales en aluminio crean un ambiente deportivo, pero acogedor.
En seguridad, la gama ofrece desde control de velocidad crucero adaptativo hasta cámara 360°, asistente de punto ciego y alerta de tráfico posterior, priorizando lo que realmente impacta la conducción diaria.
Motorizaciones calculadas para distintos perfiles.
La versión base trae un motor 1.4 TSI de 150 hp, tracción delantera y caja DSG de 7 cambios. Habla en números efectivos para quien quiere el diseño, puesta a punto y equipamiento de CUPRA, pero no necesita romper los tiempos de vuelta —0 a 100 km/h en 9.3 segundos; punta de 204 km/h—; la combinación es suficientemente ágil como para sentir que no te falta empuje en ciudad ni en carretera.
La variante tope, la VZ, aumenta el pulso con 2.0 TSI de 265 hp, tracción 4Drive y una aceleración que despierta sonrisa: 0–100 km/h en 5.9 segundos y velocidad máxima de 243 km/h.
En precios, la versión más accesible inicia en $764,900 MXN, mientras que la VZ arranca en $964,900 MXN, lo cual la coloca por encima de Tiguan o Sportage en niveles altos, pero también con equipamiento y prestaciones que justifican esa diferencia, al menos en nuestra evaluación.
CUPRA Terramar no es solo una SUV más grande: es como el escalón donde CUPRA busca ampliar su tribu sin perder su esencia deportiva. Es probable que, si ya cuentas con un SUV compacto y quieres más espacio sin abandonar conducción dinámica, este modelo te haga pensar dos veces a la hora de recorrer esa ruta en México.
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