Renault pide a Europa que apoyen a los E-Fuels y al hidrógeno

Luca de Meo, CEO de Renault, piensa que los fabricantes de autos en Europa están agobiados por emisiones mientras que las marcas chinas y americanas son apoyadas por sus gobiernos con exenciones de impuestos e inversión.

Dado que los europeos irán a las urnas este verano para elegir representantes en el Parlamento Europeo, Luca de Meo escribió una carta abierta a todo el continente en la que explica los retos a los que se enfrenta la industria automotriz europea y defiende la política que deberían adoptar.

El experimentado ejecutivo es también presidente de la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) y cree que la industria tiene un reto muy importante justo al frente, pues deben descarbonizarse por completo y adaptarse a las nacientes tecnologías que transforman a los fabricantes en proveedores de movilidad.

De Meo menciona que los fabricantes europeos están en desventaja de cara a esta transición, pues China ha invertido fuertes cantidades en el sector automotriz de su país y Estados Unidos concedió ventajas fiscales para los autos eléctricos fabricados localmente. También cree que los fabricantes europeos están sofocados por regulaciones.

“El objetivo de este peso regulatorio es hacer a Europa un campeón en términos de protección ambiental, esperando que esto contribuya a un progreso social a nivel global,” escribió. “El problema es que otros bloques comerciales son más lentos y estos impacta negativamente en el desempeño competitivos del negocio europeo.

Un plan con seis pilares

Para resolver este problema, de Meo tiene un plan y pide a la Unión Europea que desarrolle una estrategia industrial para su sector de negocios con la industria automotriz en el centro. En segundo lugar, quiere que los fabricantes de autos se reúnan con científicos, sindicatos y organizaciones no gubernamentales para desarrollar dicha estrategia, que apoyará a la industria de la misma forma en que China apoyó a sus fabricantes, constructores de baterías y otros proveedores.

El tercer punto es que establecer una nueva organización que regule a las regulaciones, para frenar las nuevas reglar a las que se enfrentan los fabricantes y el cuarto es incrementar el acceso a la energía verde. El quinto punto menciona que hay que desarrollar la experiencia en desarrollo de software de Europa y los proveedores de materia prima para autos.

Finalmente, espera que la Unión Europea entienda la importancia que tiene la industria automotriz a nivel social y económico y la apoye con un modelo que combine las mejores estrategias ya empleadas en Estados Unidos y China. Dice que la industria automotriz no se opone a los planes ecológicos europeos, pero quiere que los reguladores los revisen.

Renault pide E-Fuels e hidrógeno para Europa… y no solo electrificación

Adicionalmente, De Meo escribe que los autos eléctricos no deben ser la única tecnología que la Unión Europea considere ecológica porque piensa que los E-Fuels y el hidrógeno pueden ser importantes en el futuro, También pide una mayor inversión en autos pequeños, ligeros y baratos, que por regulaciones empiezan a desaparecer por la existencia de las estrictas normas de seguridad y emisiones.

Finalmente, Renault pide que Europa facilite la vida a los fabricantes de autos que quieran trabajar juntos. Pide al parlamento que estandarice la tecnología de comunicación entre vehículos e infraestructura y quiere que los avances de software puedan compartirse con otras marcas, con el ejemplo del liderazgo chino en este apartado para crear bancos de autopartes que puedan ser usados por cualquier marca para mantener a Europa en su posición en la escala global.