La especialista australiana en actividades al aire libre, Deus ex Machina, aportó su experiencia para desarrollar con Mini the Machina y The Skeg, dos de los ejemplares más divertidos del salón alemán.
Famosa por personalizar motos y apoyar actividades al aire libre como el surf, la bicicleta y la patineta, Deus ex Machina y Mini presentaron en el Salón del Automóvil de Múnich dos conceptos basados en el MINI John Cooper Works: The Machina y The Skeg.
Ninguno se fabricará en serie (lamentablemente), ya que son simplemente ejercicios de estilo. Ambos fueron diseñados por el fundador de Deus, Carby Tuckwell, y el reconocido diseñador gráfico Matt Willey, exdirector de arte de The New York Times Magazine.

Mini “The Machina”, un tributo a las carreras
Esta versión rinde homenaje a la herencia deportiva de Mini, evocando hitos como la victoria de Paddy Hopkirk en el Rally de Montecarlo de 1964, de ahí el color y varios gráficos alusivos a los rallies, como el número 37, que es el que usaba Hopkirk. Incorpora cuatro faros auxiliares en el frente, salpicaderas ensanchadas, un difusor trasero inspirado en el MINI JCW de Nürburgring y un alerón estilo Can-Am pensado para optimizar la aerodinámica.





En el interior, The Machina apuesta por un diseño minimalista y funcional. Los asientos deportivos con cinturones de cinco puntos, una jaula antivuelco y placas de aluminio en el piso refuerzan su ADN de carreras. Los paneles de las puertas están despojados de revestimientos innecesarios, mientras que el tablero y los interruptores de las palancas resaltan la estética cruda y artesanal. Un freno de mano hidráulico reemplaza al eléctrico, diseñado para maniobras precisas en conducción deportiva. No se reportan modificaciones mecánicas significativas, manteniendo el enfoque en el diseño y la experiencia de conducción.

Mini “The Skeg”, solo para surfistas
Por su parte, The Skeg se basa en el MINI John Cooper Works eléctrico, con un motor que genera 258 caballos de potencia. Inspirado en la cultura del surf, este modelo combina materiales y acabados que evocan el estilo de vida en la costa. Su carrocería, en tonos plateados y amarillos, utiliza paneles de fibra de vidrio translúcida que reducen el peso significativamente. Un alerón trasero adaptable, inspirado en la forma cóncava de una tabla de surf, y correas en el techo para transportar equipos de surf completan el diseño exterior.






El interior elimina los asientos traseros y equipa asientos deportivos forrados en neopreno resistente al agua, ideales para surfistas. El tablero de fibra de vidrio y bandejas específicas para guardar trajes de neopreno refuerzan la conexión con el océano. Al igual que en The Machina, no se reportan cambios mecánicos, manteniendo el enfoque en la estética y la funcionalidad.
Sinceramente, ambos están muy bien logrados; es una lástima que no se animen a producirlos, aunque sea en una edición limitada.