Aumento en costos laborales acelera uso de robots en plantas
La industria automotriz en Estados Unidos ha sufrido recientes incrementos en los costos laborales y esto traerá consecuencias. Según el Wall Street Journal renegociar contratos agregará $900 dólares al precio de construir un nuevo Ford durante la duración del nuevo contrato con la UAW, que terminarán en cuatro años, y alrededor de $500 dólares al costo de fabricar un nuevo Chevrolet.
Las marcas no pueden permitirse aumentos de costos tan abruptos, lo que, en opinión del medio especializado, acelerará la llegada de robots y la sustitución del capital humano de una manera más rápida a la presupuestada.
En 2022, la Federación Internacional de Robótica registró que la industria automotriz mundial instaló 136,000 robots industriales nuevos. Esto es mucho, especialmente al compararlo con otras industrias, como la electrónica. Este aumento no beneficia a los miembros de la UAW, pero el informe sugiere que las fábricas de automóviles no despedirán a los trabajadores humanos; simplemente los reemplazarán con máquinas cuando se retiren o se vayan.
Además, otro motivo para la mayor automatización en la industria automotriz es el auge en la construcción de nuevas fábricas de baterías y vehículos eléctricos. Es más fácil instalar robots en una nueva fábrica que agregarlos a una que ya existe, donde hay un costo significativo para hacer el cambio.
Sin embargo, aunque los robots no necesitan vacaciones, pensiones ni pausas para ir al baño, tienen desventajas. Son caros de comprar y de mantener, además, todavía necesitan personas para programarlos, y al principio podrían causar problemas de calidad.
El destino parece ser claro, pero la dependencia humana sigue siendo necesaria en la industria.