Autos deportivos, ¿tener uno o no tener uno?, esa es la cuestión
Spoiler Alert: este texto contiene nostalgia y amor por los autos, de esos muchos de antes y pocos de ahora. ¿Recuerdan cuando tener un auto era un bien patrimonial o incluso un símbolo de estatus?, sí, posiblemente con esta pregunta evidencie mi edad, soy de esos de la generación de cemento a los que los autos nos encantaban y teníamos un póster del Ferrari Testarrosa, el Lamborghini Countach o a K.I.T.T. con el Pontiac Trans-Am, hoy los autos se convirtieron en una extensión de nuestro teléfono, y ante eso ¿para qué necesitaríamos autos deportivos?
El ser humano vive de modas y tendencias, y estas son dictadas por las marcas, lo de hoy es estar conectado a internet y estar revisando el teléfono o computadora a cada minuto y el vivir de prisa como si no hubiera un mañana, esto se ha traslapado a los autos que con la inminente conducción autónoma quieren que solo lo usemos de transporte mientras que seguimos viendo redes sociales, dejando atrás el gusto por manejar, algo que aun en el presente hace latir el corazón de las personas, pero ya no está de moda…
Los autos deportivos de antes era una herramienta más personal, donde eras el centro neural, tú eres el que maneja y controla todo con una caja manual, perillas en los radios, aire acondicionado, salir a dar una vuelta a alguna carretera mientras escuchabas música o de plano abrías la ventana para sentir el viento y el sonido del motor, sí, son cosas del pasado, pero aún siguen emocionando.
Manejar autos deportivos puede ser un momento de catarsis que te haga sonreír
“Si todo parece bajo control, es que no vas suficientemente rápido”, (frase que se le atribuye a Michael Andretti y también a Gilles Villeneuve), es una frase que aplica mucho en el presente, todo debe estar con la tecnología muy bien cuadrado, pero esto, resta emoción y hace que algunos sistemas de ayudas electrónicas sean intrusivos y molestos. Algunas marcas han perdido su esencia, por ejemplo Mitsubishi, pero no dejemos que eso nos pase como individuos.
Un auto deportivo es divertido y no, no decimos que salgas a manejar como loco a la calle, ve a hacer un viaje largo solo o en pareja, visita nuevos lugares o si tienes la oportunidad de ir a un Track Day no lo desperdicies ve qué tan rápido puedes ser en un ambiente controlado y seguro no vas a querer bajar.
Un auto deportivo está pensado para ir rápido (casi siempre) siente el empuje de un motor V8, V6 o incluso algún 4 cilindros turbo, sí, tienen su encanto, ¿terracería, lluvia?, no importa, recuerda cuando eras niño y esos elementos eran lo de menos, sino el reír con los amigos.
Sal, maneja, conoce, vuélvete a sentir vivo en un auto que haga ruido y huela a gasolina
Cuando tienes un auto deportivo sirve como un imán para miradas, y podrás encontrar nuevas amistades que estén igual que tú o añoren tener un auto así, además si como el que escribe esto, no eres nada guapo tu auto hará que te veas bien y quién sabe en una de tus salidas a liberarte encuentres al amor de tu vida.
Y claro, si algún día ya no quieres saber nada de los autos deportivos el valor de reventa suele ser el mejor en ellos, ya que se escapan a los convencionalismos de los autos del presente que solo están para llevarte del punto A al B, sin estilo.
Este 2025 sal de la rutina y si tienes la posibilidad de hacerte de un auto deportivo ve a manejar, escapa de la red social y circula por un momento por la vida real, y oye, no creas que un deportivo tiene que ser caro, recuerda que hasta el querido “Vocho” fue una portentosa máquina de velocidad.
Feliz año nuevo de parte de tus amigos que escriben en AutoAnalítica, y nos vemos en los coches en algún camino de este México Lindo y Querido.