El Programa de Evaluación de Vehículos Nuevos para América Latina y el Caribe (Latin NCAP) dio a conocer los resultados de la octava ronda de resultados de 2025, en la que tanto el Toyota Yaris Sedán como el Hatchback obtuvieron una calificación general al obtener solo dos estrellas. Este resultado resulta decepcionante y hasta sorpresivo, sobre todo si se considera que de serie estos modelos cuentan con seis bolsas de aire y control electrónico de estabilidad (ESC).
Los modelos evaluados corresponden al Yaris Sedán fabricado en Tailandia y al Yaris hatchback producido en Brasil. En las pruebas de seguridad, ambos vehículos registraron 65.79% en protección para ocupante adulto, 63.85% en ocupante infantil, 53.59% en protección a peatones y usuarios vulnerables de las vías, y 58.14% en asistencia a la seguridad.

Lo curioso, es que el Toyota Yaris Hatchback corresponde a una versión más antigua que fue lanzada originalmente en 2013 y que es construida sobre la arquitectura EFC. Por ello, sorprende que los resultados obtenidos entre ambos formados sean idénticos, cuando, en la mayoría de los casos no suele ser así.
Latin NCAP sometió al Yaris Sedán a pruebas de impacto frontal, impacto lateral, impacto lateral contra poste, latigazo cervical, protección a peatones y funcionamiento del ESC. En el caso específico del sedán, se evaluó la actual versión con código interno AC100, misma que fue desarrollada en conjunto con Daihatsu y que se cimenta sobre la plataforma DNGA-B.
Un resultado de seguridad muy llamativo por parte de Yaris Sedán, en ambas versiones que se comercializan en México

En este sentido, en el impacto frontal, tanto el Yaris Sedán como el hatchback mostraron una estructura y un área de los pies inestables. Además, la protección al pecho del conductor fue catalogada como marginal, un punto clave que influyó de manera directa en la calificación de ocupante adulto y que evidencia limitaciones en el desempeño estructural del vehículo.
Referente a la protección infantil, Latin NCAP destacó que los niños ocupantes obtuvieron una protección completa cuando se utilizaron sistemas de retención infantil de alto desempeño, instalados mirando hacia atrás y fijados mediante anclajes ISOFIX. Sin embargo, la falta de un interruptor para desactivar la bolsa de aire del pasajero delantero al colocar una silla infantil orientada hacia atrás en ese asiento penalizó de forma importante el resultado final en este rubro.

En cuanto a la evaluación de protección a peatones del Yaris Sedán, se mostró un desempeño promedio. De acuerdo con el informe, esto se debe principalmente a la ausencia de puntuación en los sistemas de frenado autónomo de emergencia para usuarios vulnerables de las vías (AEB VRU).
En el apartado de asistencias a la conducción, la calificación también se vio afectada por la falta de sistemas como la asistencia de velocidad y por la imposibilidad de sumar puntos adicionales debido a la disponibilidad limitada del frenado autónomo de emergencia.
Solo como aclaratoria, estos resultados son plenamente aplicables a los modelos que se vende en México.



