Kia K4 Hatchback: Nueva York 2025, el hatch compacto sigue vivo

Cuando todos parecen abandonar el segmento de los hatchbacks compactos, Kia sigue llenando la gama con nuevos modelos y confirma oficialmente que ofrecerá un K4 Hatchback en Norteamérica, para competir en un segmento en el que ya solamente aparecen el Mazda3 Hatchback y el SEAT León.
Llegando un año más tarde que el K4 Sedán, el hatchback es considerablemente más corto y no sacrifica demasiado en términos de utilidad. La marca coreana había compartido anteriormente imágenes a través de sus canales oficiales, pero el Salón de Nueva York fue el escaparate perfecto para mostrarlo en vivo y en directo por primera ocasión, fabricado orgullosamente en Nuevo León, México.
El diseño frontal es idéntico al del sedán, pero la silueta y las proporciones son completamente distintas. El perfil oculta las manijas de las puertas traseras y muestra una línea de hombros musculosa con un acento en color negro que une a las ventanas laterales con el medallón posterior, mientras que la parte trasera tiene una identidad propia, con una barra de LED y un alerón en el techo.



El Kia K4 Hatchback es mucho más pequeño que el sedán, porque mantiene la distancia entre ejes pero reduce notablemente el voladizo trasero, de modo que es 279 mm más corto, una diferencia que se reduce a 269 mm si comparamos a las versiones GT-line. De acuerdo con Kia, el hatchback es más maniobrable, especialmente en espacios reducidos.
Kia K4 Hatchback: Misma cabina que en el sedán, pero aun más espaciosa
La cabina mantiene la misma configuración que el sedán, con un cuadro de instrumentos digital unido a la pantalla táctil central en el mismo marco y con un panel digital para el aire acondicionado en las versiones tope de gama. A pesar de la reducción en la longitud, Kia mantiene el espacio de piernas en la plaza trasera y añade 25 mm de espacio para cabeza gracias a la silueta, que es más plana en la parte posterior.

El área más beneficiada es la del espacio de carga, con 629 litros de capacidad contra los 413 del sedán, en gran medida porque el diseño de hatchback le permite ganar espacio vertical, hacia arriba.
Mecánicamente, Kia mantendrá los motores y transmisiones del K4 Sedán, aunque queda confirmar como llegará a México. Regresará el motor de 2.0 litros y 147 hp, pero todo parece indicar que, a diferencia del sedán, no lo habrá con transmisión manual y tendremos como única alternativa a la automática CVT.

También es probable que, como en el K3, Kia no ofrezca los grados de equipamiento base en el hatchback, haciendo que la versión de entrada sea la LX con un precio más alto que el L con carrocería sedán.
Mismas mecánicas para el Kia K4 Hatchback
Para la versión GT-line volverá el motor turbo de 1.6 litros y cuatro cilindros con 190 hp y 195 lb-pie de par, asociado exclusivamente con una transmisión automática de ocho relaciones. Como en el sedán, el Kia K4 Hatchback tendrá una versión GT-line que se distingue por rines de aluminio de 18 pulgadas y acabados en negro brillante en los espejos, faldones laterales y molduras de salpicaderas, además de una puesta a punto más firme para la suspensión.

El GT-line con motor turbo añade faros delanteros de LED de proyección, luces antiniebla de LED y discos de freno una pulgada más grande en el eje delantero, llegando a 16 pulgadas.
El nuevo Kia K4 Hatchback llegará a México hacia finales de año y la gama de precios y versiones se anunciará más adelante, probablemente durante el mes de julio con la celebración de los 10 años de Kia en nuestro país.