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Baterías: la nueva escasez que enfrenta la industria automotriz

   

Diferentes marcas reportan problemas para llegar a la meta de producción de coches eléctricos, gracias a la falta de baterías.

No es un secreto que la pandemia trajo consigo consecuencias notables para la industria automotriz, que sigue viéndose afectada, en menor medida, por la ausencia de chips para la producción de automóviles. Parece que la adversidad prevalece, pues se avecina una nueva era de carencia: la de las baterías para los coches eléctricos.

Diversas fuentes aseveran que distintas armadoras reportan a sus inversionistas que no podrán cumplir con sus proyecciones de producción de automóviles impulsados por energía eléctrica, debido a que los proveedores no cuentan con suficientes acumuladores de energía para satisfacer la demanda.

Los casos son claros y entre ellos se encuentra Ford, quien este año estima perder alrededor de 4.5 mil millones de dólares en el rubro de los eléctricos, al no poder cumplir con las metas establecidas a inicios de año.

General Motors sigue el mismo tenor y, aunque pretendían producir alrededor de 100,000 mil unidades eléctricas en la segunda mitad del 2023, la realidad es que esto podría no suceder, gracias al desabasto de baterías.

Esta es una de las razones por las cuales los vehículos eléctricos no bajan de precio, debido a que la gran mayoría de las armadoras dependen de proveeduría externa para poder alcanzar sus metas de producción.

El único caso distinto es el de Tesla, quien es, a grandes rasgos, su propio proveedor y es por ello que han logrado costos mas bajos para sus productos y una disponibilidad más al alcance de los compradores, en comparación a las firmas generalistas.

Especialistas indican que la tendencia negativa continuará e incluso podría agravarse, por lo que las baterías son el nuevo problema que enfrentará la industria automotriz global.

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