Los e-fuels podrían ayudar a mantener a los coches de combustión
Los e-fuels permiten los coches de combustión sean tan limpios como un eléctrico, sin usar materiales como el litio o el cobre.
La promesa de los combustibles sintéticos o e-fuels como muchos los conocen podrían ser la salvación para el adorado motor de combustión interna. Gracias a que son neutrales en sus emisiones de carbono, un auto con estos combustibles puede ser tan limpio como un eléctrico permitiendo que los entusiastas gocemos del carácter de un motor así, con sus ruidos y vibraciones.
Según reporta Automotive News, los fabricantes de autos están empezando a ver un beneficio en los e-fuels no solamente desde la perspectiva de un entusiasta, sino de una plenamente práctica. Uno de los grandes factores que impacta negativamente el desempeño de los autos de baterías es su peso, que puede ser cientos de kilogramos más alto que el de un auto comparable con motor de gasolina y que en autos deportivos, va en contra de la razón de ser del coche, por lo que mantener el motor de combustión y su menor peso puede ser una gran ventaja.
Otro problema con los EVs que los e-fuels puedes solventar es el de la autonomía y sus fluctuaciones. Por más que los fabricantes se esfuercen en entregar el mayor rango posible, este varía mucho en función de las condiciones externas, como la temperatura, mucho más que en un auto de combustión interna. Las marcas han intentado combatir este fenómeno con tiempos de carga más rápidos, pero aun los más rápidos son de 20 minutos para llegar de 0 al 80 por ciento, mientras que con e-fuels ese número baja a solo dos minutos por un tanque lleno.
Sirven con cualquier motor de gasolina
Además, los e-fuels exigen pocas o ninguna modificación a los motores de gasolina existentes para funcionar, por lo que no hay costos relacionados con usarlos y estos e-fuels permiten hacer que los coches que ya circulan en las calles sean casi tan limpios como un EV sin tener cambiarlos por uno.
Un punto en contra de los e-fuels es que producirlos no es sencillo, porque el proceso requiere de retirar tanto CO2 de la atmósfera como estos generan en la combustión. Inicialmente, se remueve ese CO2 y luego se combina con hidrógeno obtenido vía hidrolisis, que implica separarlo del agua y por tanto, necesita mucho de este líquido vital y también de energía eléctrica, que debe venir De Fuentes renovables para que el combustible sea realmente sustentable. Por ese proceso, de momento los e-fuels son todavía mucho más costosos que la gasolina.
Fabricantes como Porsche han invertido en esta solución y ya tienen incluso una planta funcional en Chile, que produce 130 mil litros por año y que llegará a 55 millones en 2025 y 550 millones en 2027, con lo que el precio bajará una vez que la tecnología sea más popular. También exploran con plantas adicionales de e-fuels en Texas, Australia y Sudáfrica, mientras que marcas como Mazda o Suzuki que también apuntan a mantener el motor de combustión vivo, han hecho otros esfuerzos.
Stellantis ya probó estos combustibles en todos sus motores y Ferrari también quiere usarlos en lugar de las baterías.