Marcas chinas son tan eficientes que ni impuestos los detendrán
Los altos márgenes de utilidad con los que operan las marcas chinas son tan altos, que según un estudio ni siquiera los impuestos que van a tener que pagar en Europa por cada auto nuevo que vendan va a detenerlos. Estas cargas están pensadas para nivelar el campo de juego con la venta de autos, principalmente eléctricos, en Europa y tratar de darle a los fabricantes locales una competencia más justa ante los incentivos que reciben del gobierno chino.
Los expertos económicos creen que las marcas chinas son tan eficientes y sus márgenes de utilidad tan amplios que podrán absorber esos impuestos fácilmente y seguir entregando productos competitivos a precios de auténtica ganga a los compradores europeos.
Los legisladores en Europa están preocupados de que los subsidios que el estado chino le da a sus fabricantes de autos establezcan una ventaja económica injusta ahora que sus autos empiezan a inundar el viejo continente en gran escala. La decisión final de los impuestos europeos a autos chinos se dará a conocer pronto, aunque los analistas esperan que se anuncie una tarifa del 30 por ciento, aunque los expertos creen que no será suficiente para reducir la cantidad de autos chinos que llegan a Europa.
Las marcas chinas son tan eficientes que necesitarían muchos impuestos para perder su ventaja
Los márgenes de utilidad de las marcas chinas son tan grandes que las propias marcas podrían manejar ese impuesto sin que el comprador note diferencia en el precio final, aunque las marcas en sí estarían generando una menor utilidad por auto.
Los analistas creen que los impuestos tendrían que ser del 50% o más para que las importaciones chinas dejen de tener sentido para la mayoría de los compradores en el mercado.
Sin embargo, dicha opinión no es compartida por todos los expertos, pues un estudio reciente del Instituto Kiel de Economía Global preduce que, con un impuesto del 20%, dejarían de importarte a Europa 3,800 millones de dólares en autos eléctricos chinos, unos 125,000 autos, que serían vendidos fabricantes alemanes, ingleses, italianos, franceses y españoles.
China también estaría planeando medidas de respuesta si la Unión Europea aplica los impuestos, aplicando unos similares a los autos europeos que se vendan en su país.