Toyota Yaris Sedán S CVT Hi 2023: A prueba
El Toyota Yaris Sedán se reinventó por completo, recibiendo al fin una generación realmente nueva luego de años con actualizaciones menores.
El segmento de los sedanes pequeños o subcompactos sigue siendo el de mayor volumen de ventas, tanto que en 2022, los líderes del mercado pertenecen a este nicho, con el Kia Rio en el primer lugar y el Nissan Versa un pasito detrás. Luego de años de tener un Yaris Sedán que no estaba a la altura de los mejores, Toyota tiene una propuesta firme para hacerse de una porción de este segmento.
Esta nueva entrega emplea la plataforma DNGA, que a su vez es una versión más sencilla que la TNGA propia de la marca desarrollada por el brazo asiático, Daihatsu, para autos accesibles en mercados en desarrollo. Esta arquitectura es la misma que encontramos en la Toyota Raize y en la más reciente generación de la Avanza.
Habitáculo vistoso y de calidad
El interior del Toyota Yaris Sedán tiene virtudes evidentes, empezando por la calidad de los ensambles, que inspira solidez, cosa que esperamos de otros productos de la marca pero no de este segmento. También es vistoso por el inserto de cuero en el tablero, aunque otros plásticos del tablero y las puertas den la impresión de simpleza.
Los asientos gustan por la mezcla en el tapizado, entre tela y cuero sintético, que mantienen una temperatura templada en toda la cabina si se queda el auto bajo el sol algunas horas. Para ser un sedán pequeño, el aprovechamiento del espacio nos parece estupendo, porque especialmente en plazas traseras tiene buen espacio para hombros, piernas y cabeza, así la plaza central esté comprometida por el túnel de transmisión.
El espacio en cajuela, con 475 litros homologados también es referente y queda apenas por detrás del líder, el Volkswagen Virtus con sus 521 litros.
El acabado S CVT Hi que probamos es el más costoso y tiene una buena lista de equipamiento, empezando por el cuadro de instrumentos digital de siete pulgadas, de gráficos sencillos. La pantalla táctil sí podría mucho ser mejor comparada con otras unidades en autos de precio similar, porque la nitidez es pobre y también lo es la respuesta al tacto, pero echa mano de menús intuitivos e interfaces Android Auto y Apple CarPlay.
Otros detalles se explican con el acceso y arranque remoto, el clima automático con ventilas para la banca trasera, los rines de aluminio o los mandos en el volante y también por otros ítems asociados al confort y a la seguridad, como la cámara de estacionamiento trasera o los faros de LED.
El equipamiento de seguridad contempla seis bolsas de aire y ESP en todas sus versiones, pero también puede integrar asistentes avanzados de manejo en la versión tope, con alerta de abandono de carril monitoreo de punto ciego, control crucero adaptativo y alerta de colisión frontal con frenado autónomo de emergencia.
Mecánica y dinámica
El motor del Yaris se apega a los estándares de un segmento, marcados por motores de cuatro cilindros con 1.5 o 1.6 litros y alrededor de 110 hp. El del Toyota Yaris Sedán tiene 1.5 litros, 105 hp y 104 lb-pie y se asocia a una transmisión automática CVT en la versión que probamos, aunque también cuenta con una manual de cinco cambios en las versiones Base y S.
El conjunto mecánico sorprendió en pruebas dinámicas, alcanzando 100 km/h en 14.7 segundos, más rápido que el Kia Rio con más potencia en el papel y también por una recuperación de 80 a 120 km/h en 10.6 segundos, una de las más rápidas si hacemos de lado al dato del Chevrolet Onix con motor turbo o al Mazda2 con su bloque de alta compresión, inyección directa y, en las versiones i Grand Touring y Carbon Edition, asistencia microhíbrida.
Los consumos quedan en unos razonables 13.1 km/l en un ciclo mixto, entre ciudad y autopista.
En donde no termina de convencer en las sensaciones, porque aunque esté bien calibrada, peca de ruidosa al acelerar a fondo y por momentos da jaloneos que son habituales en cajas CVT en segmentos inferiores o de unidades más antiguas.
Pasando a la precisión de sus mandos, hay que decir que la dirección es poco comunicativa y más floja de lo que nos gustaría, con una suspensión blanda que entrega una marcha refinada aunque es algo más ruidosa que coches como el Rio, el Versa o los referentes, el Virtus y el Mazda2.
¿Es el nuevo referente? No, aunque sí es competitivo y especialmente por el precio, que en la versión evaluada es más bajo que el de sus rivales con equipamiento comparable, tiene una estupenda relación precio beneficio, por ser más accesible que un Kia Rio o un Volkswagen Virtus. El problema será encontrarlo nuevo para poder comprarlo.
| Toyota Yaris Sedán | |
| Motor: | 4 cil. 1.5 litros; 105 hp y 104 lb-pie |
| Transmisión | Automática; CVT |
| Consumo mixto | 13.1 km/l |
| Precios y versiones | |
| Base MT | $299,900 |
| Base CVT | $314,900 |
| S MT | $324,900 |
| S CVT | $339,900 |
| *S CVT Hi | $375,900 |
| *Versión probada | |
Nos gusta
- Habitabilidad
- Contenido de seguridad con asistencias de manejo
- Calidad de ensambles
Nos gustaría
- Caja más refinada
- Sistema de infotenimiento más moderno
- Cuadro de instrumentos más intuitivo
